VIVENCIA DEL III FESTIVAL NACIONAL DANZA ORIENTAL EN VALLADOLID

Con muchos nervios e ilusionadas a tope, cogimos el tren rumbo a Valladolid en la mañana del Viernes 20 de Febrero. Hacia allí fuimos: Marlara, Marina, Elena y yo. Llegamos con el tiempo justo para dejar las maletas y poder conocer esta maravillosa ciudad antes de empezar el Festival. Sobre las 21h asistimos a la Hafla organizada en un apartado del polideportivo en la que nos pasó algo curioso.. durante las actuaciones de las bailarinas que libremente participaron, sólo se escuchaban las voces de animo de "las sevillanas" (así es como nos llamaban). Al principio fue algo raro pero sin saber porqué, en poco tiempo contagiamos a los espectadores y acabamos todos animando, fue algo genial.. Seguidamente asistimos a la cena con los profesores y allí pudimos conocerlos mas íntimamente, hablar con ellos y con las demás alumnas. Fue una noche muy mágica. Al día siguiente asistimos a los intensivos con sadie y Munique, intentamos sacar partido en todo momento de sus magestuosas enseñanzas, es maravilloso poder conocer a gente con tanta sabiduría y tan llana, incluida también Anisa Saguira, un encanto de mujer y a Victoria Ivanova, maravillosa.. Tras los intensivos del sábado, asistimos a la Gala de los profesores. Allí pude comprobar como con 26 años se me puede quedar la boca abierta mas de media hora, jaja.. fue impresionante, en serio, se me ocurre decir que nos transmitieron entre otras muchas cosas: sentimiento, belleza, diversión, maestría, entusiasmo, felicidad.. y me quedo corta.. Para que os hagáis una idea, habíamos recibido tanta energía por nuestros poros de la piel que esa noche tuvimos que tomar tila para poder dormir, os lo juro.
El domingo hicimos los últimos intensivos y con mucha pena nos despedimos de nuestras compañeras, las profesoras, nuestra amiga camarera que me parto con ella, de Anisa y sus padres tan encantadores, y de la ciudad que reunió a tantas personas unidas por una misma pasión, la Danza Oriental. Un beso muy grande a mis fieles compañeras de viaje (sin vosotras nada sería igual) y a ti, mi lectora, por querer compartir conmigo mis vivencias. Besos :)